martes, 8 de julio de 2014

Soñarte

No existe el tiempo. Que se pare, que nada cambie. Que las ganas que te tengo no se pasen. Que sólo con verte ya me ponga a mil. Desearte, necesitarte, soñarte.





Estoy harta de los convencionalismos. Tu a mí me gustas y es suficiente. Y si el tiempo, que a veces parece que no pasa y otras que vuela, tenía que enseñarme algunas lecciones, le perdono. Porque, cuando menos te lo esperas, sucede. De la forma más inesperada, en el sitio menos pensado. Cada relación está plagada de coincidencias casi perfectas, y cuando estamos en una de ellas, simplemente nos dejamos envolver por esa capa mágica, mientras descubrimos que nos encanta lo que antes despreciábamos, o nos era indiferente.

He querido correr mucho. Y luego he parado deprisa. Poner nombres a las cosas no es algo que necesite. Perderme en tus ojos sí. Quizá sea difícil, pero más difícil es sentir lo que siento en tan poco tiempo, y que sea mutuo. No te puedo decir en persona todo lo que quiero contigo, que es mucho y me da miedo pero a la vez... me hace muy feliz.


Y dejar a las cosas pasar
y que digan su nombre
Y mirar que lo hay es verdad
y que nada se esconde...
Y pensar y dejarse llevar
y no ponerle nombre
No hace falta,
si sientes ya está y déjame que te ronde
Emocional, Dani Martín



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